En el debito un encendido alambre que señala el entonces,
la áurea mirada de todo lo fugaz,
el mar arbóreo de la noche oscura,
un brillo de faros en la penumbra,
la quiebra debida de su espalda al caer sobre mí,
el sabor inexplicable de su boca,
la flecha donde dibujar el sendero de la saciada lengua,
el derroche de la esgrima,
el canto apenas perceptible de un pájaro en el bosque,
la soledad prendida al silencio de la otra piel cuando se desconocen,
la argolla con que alterar el paso de las horas,
la palidez de un orgasmo junto al otro,
el lado más certero al cerrar los ojos y adivinarlo todo,
la urdimbre donde no eres más que el naufrago…
Un nuevo deceso cuando ya no hay palabras
y sólo se escucha el murmullo de la lluvia.
la áurea mirada de todo lo fugaz,
el mar arbóreo de la noche oscura,
un brillo de faros en la penumbra,
la quiebra debida de su espalda al caer sobre mí,
el sabor inexplicable de su boca,
la flecha donde dibujar el sendero de la saciada lengua,
el derroche de la esgrima,
el canto apenas perceptible de un pájaro en el bosque,
la soledad prendida al silencio de la otra piel cuando se desconocen,
la argolla con que alterar el paso de las horas,
la palidez de un orgasmo junto al otro,
el lado más certero al cerrar los ojos y adivinarlo todo,
la urdimbre donde no eres más que el naufrago…
Un nuevo deceso cuando ya no hay palabras
y sólo se escucha el murmullo de la lluvia.
1 comentario:
Que derroche de bocobulario, es admirable!!
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