Él miraba cómo ella bajaba la rampa mecánica, y luego caminaba junto a los vagones, buscando el suyo. Mientras subía los dos peldaños, ella se giró y le sonrió. Pero él ya no pudo ver su sonrisa.
No sé porqué me sentí por un momento terriblemente identificada. Lástima que cuando decidí perder mi viaje por buscar su mirada, la encontré pero se vengó de mí borrando por mucho tiempo mi sonrisa.
Un brillante poema, la fotografìa, se respira ese latido acompasado, esa sonrisa sostenida en el viento. Bellìsimo, Fer. Que tengas un bello fin de semana
Me ha gustado tanto la estación, la encontré tan delicada, que en definitiva alli yo esperaria a alguien en especial, se vé romantica -la estación- de por si.
6 comentarios:
No sé porqué me sentí por un momento terriblemente identificada. Lástima que cuando decidí perder mi viaje por buscar su mirada, la encontré pero se vengó de mí borrando por mucho tiempo mi sonrisa.
Un brillante poema, la fotografìa, se respira ese latido acompasado, esa sonrisa sostenida en el viento.
Bellìsimo, Fer.
Que tengas un bello fin de semana
El destino, a veces, se muestra esquivo y burlón, sin embargo, otras acierta de pleno. Me ha gustado mucho el microrrelato.
Besos
Me ha gustado tanto la estación, la encontré tan delicada, que en definitiva alli yo esperaria a alguien en especial, se vé romantica -la estación- de por si.
Besos ♥
M.
Pena de sonrisa perdida por no mirar.
Pasa tantas veces...
Momentos que no son.
abrazos
Alba
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