ESTRAVAGARIOSIGLO21

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ESCRIBO PARA REDIMIRME DE MI MISMO

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lunes, 27 de junio de 2016

Faro XXI











Recórreme en silencio,

respírame en las olas,

simple soledad de océanos,

en este faro habito.

Nuestra batalla es herida de susurros,

azul en tu cuerpo, mi saliva es la luz,

una cadena, una condena,

de mi lengua en tu piel

como si nunca fueras a abandonarme,

como si la noche fuera a ser eterna

y nuestro deseo se alimentará

de la oscura línea del horizonte.


f.






lunes, 20 de junio de 2016

Faro XX








Recuérdame en el verano imposible

de noches donde el mar

apenas nos hablaba,

quieto, ensimismado,

dormitando las voces de los viejos marinos.

Entre los dos quedaban sólo caricias,

un abismo donde perdernos el uno en el otro,

y esa tenue mirada blanca que repasaba constante su lección

inundando de estelas la línea oscura del horizonte.


f.









lunes, 13 de junio de 2016

Faro XIX










Un bosque de nubes puede ser un mar encrespado,

entregadas al oleaje y a la distancia de las islas,

mientras cabalga la soledad como una centella

y el trueno es el agobio del incendio.

La llama prende, el mar es un topacio,

la piedra de acuoso llanto,

el resplandor de todos los diluvios,

y un faro es el asombro,

lo humano que divisa el final del mundo.



f.










lunes, 6 de junio de 2016

Faro XVIII







El faro de la luna



Hundida y roja

te desnudas en el mar

y hierves en la sangre de los silencios.

Admiro el viaje lento y hermético de tu estación de nieve,

redonda y extasiada rebosas del calor de tu deseo

y sin embargo guardas un poder de pájaros

mientras mi luz apenas deja ver el peligro certero de tu desasosiego.



f.







lunes, 30 de mayo de 2016

Faro XVII










Habito un lugar de pájaros y sombras.

Soy agreste como todo lo que trasciende en el silencio

y hablo con los astros de todo lo que callo,

al fin y al cabo la soledad es una huella,

la parte más clara de una ausencia.

Mientras tú, apenas me dibujas en tu mente,

aligeras el paso mirando el horizonte

y en tu pecho adormeces los días esperándome.

Así, seremos Ulises esclavo de una isla

y Penélope eternamente

buscándome en la luz de la noche.






f.



lunes, 23 de mayo de 2016

Faro XVI










Soy el lado más sincero de la noche.

En la penumbra se escucha respirar al mar

y sin embargo mi mano sacia de sed el horizonte.

Hay paisajes impensables

como besos que duermen en tus labios,

allí dirijo mis pasos,

la luz húmeda e inalterable

que hace de la fugacidad la vida.



f.






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